@article{Taylor V_2017, title={Mitos en la investigación cuantitativa}, volume={17}, url={https://riee.um.edu.mx/index.php/RIEE/article/view/186}, DOI={10.37354/riee.2017.174}, abstractNote={<p>La palabra “mito” proviene del griego (μῦθος) y refería a una historia tradicional (Oxford Living Dictionaries, 2018). A través del tiempo, sin embargo, el término cobró un segundo significado, el de una idea o creencia popular, pero errónea.</p> <p>Tomada esa segunda definición, nos damos cuenta de que los mitos han existido, quizás desde el comienzo de la historia, y algunos han persistido aún —mitos de enormes pulpos marinos que atrapan naves enteras, de extrañas criaturas peludas que caminan como hombres. Y tenemos también mitos contemporáneos, como los que aparecen en las películas. ¿Será que también pueden existir mitos en la investigación? Determinadas ideas que podríamos pensar que son ciertas, aunque populares, son erróneas. En este artículo consideraremos varios de estos mitos. Algunos de ellos, de hecho, fueron identificados hace años (Campbell y Stanley, 1963; Robinson, 1970), pero persisten aún.</p&gt;}, number={2}, journal={RIEE | Revista Internacional de Estudios en Educación}, author={Taylor V, John Wesley}, year={2017}, month={nov.}, pages={134-144} }